Tras un periodo, sin duda demasiado prolongado de
abandono he decidido volver “al ataque” con una nueva serie de entradas.
En general, este blog ha cubierto muchos campos que se
pueden considerar prácticos. No obstante a menudo para disfrutar mas de nuestra
visita a un lugar es conveniente tener algunos conocimientos, no necesariamente
extensos y detallados pero si generales que nos ayuden a valorar mejor lo que
vemos.
Por establecer un paralelismo con España (por poner un
ejemplo que conozca bien) imaginemos que visitamos la “Alhambra de Granada”.
Sin conocimiento precio vemos un edificio bonito y todo eso. Si conocemos
aunque sea de forma superficial su historia, la cultura de quienes la hicieron
y como llegó hasta nosotros nuestra experiencia será mas plena.
Japón es un país lleno de riquezas históricas. Tiene mas
de veinte lugares considerados como patrimonio de la humanidad por la UNESCO, y
una enorme cantidad de tesoros culturales que si conocemos un poco su historia,
aunque sea por encima nos hará apreciarlos en su justa medida.
Lamentablemente en occidente la historia en general del
lejano oriente se enseña únicamente en relación con sus interacciones con
occidente. Incluso en algunos lugares se cita a Fernao Mendes Pinto como el
“descubridor de Japón” en el siglo, como
si Japón no hubiera estado habitado anteriormente y no tuviera ya a esas
alturas siglos de historia con una cultura refinada y rica.
El tema histórico es necesariamente largo y a veces
complejo, pero lo fraccionaremos en diferentes partes que sean fáciles de
entender. Obviamente no es necesario aprenderse estas cosas, pero si las
conocemos aunque solo sea por encima ya nos ayudará a disfrutar mas de una
visita a este país.
Otro punto que puede complicar las cosas es que aunque
las primeras muestras de asentamientos humanos en Japón datan del paleolítico
(hace unos 100.000 años) la cronología puede ser complicada al abarcar Japón
varias islas separadas, con lo que en realidad se han dado a lo largo de los
siglos a menudo culturas separadas, cada una con su nombre que complican las
cosas. En aras de la simplicidad nos centraremos principalmente en la historia
de las islas centrales: Honshu, Shikoku y Kyushu. Tenemos aparte la zona de
Okinawa que no fue realmente parte de lo que podríamos considerar el Japón
moderno hasta el siglo XIX, y la gran isla de Hokkaido al norte también por esa
época llegó a formar parte de lo que hoy en día es Japón. Esas dos islas tienen
por lo tanto su propia historia, sin duda relacionada con la de Japón pero con
sus propias particularidades separadas, y las trataremos aparte en su momento.
Por lo tanto, nuestro viaje por la historia se va a
centrar en principio en las tres grandes islas centrales de Japón, y trataremos
por separado tanto Hokkaido como las islas Nansei, también conocidas como islas
Ryūkyū de las que la mas conocida es
Okinawa.
Otro pequeño problema que vamos a abordar a lo largo de
este recorrido, es que durante buena parte de la historia que el viajero va a considerar interesante, generalmente
comprendida en ese periodo de emperadores, señores guerreros y demás los
nombres de los protagonistas a menudo no eran algo constante. Algunos de los
protagonistas de la historia de Japón en determinados periodos podían cambiar
de nombre varias veces a lo largo de su vida. Un ejemplo típico seria el famoso
Toyotomi Hideyoshi que inicialmente se llamaba 'Kinoshita Tokichiro', luego cambió su nombre
a 'Hashiba Hideyoshi' y posteriormente al primero que he mencionado. Esto
obviamente puede causar confusiones, de manera que en general me referiré a los
diferentes personajes usando su nombre mas conocido, generalmente el último que
usaron. Puede que desde un punto de vista estricto no sea lo mas correcto, pero
nuestro interés es conocer de forma somera la historia de un país para
disfrutar mas de nuestra visita, no pasar un examen de historia.
Os adelanto que algunos personajes históricos
prácticamente requerirán de una entrada para ellos solos, espero que incluso
así podamos disfrutar estas entradas que me temo no serán pocas, ya que aparte
de emperadores y guerreros Japón ha dado al mundo también a grandes literatos y
artistas.
Finalmente un aviso a navegantes. La historia de Japón no
carece de lugares oscuros y algunas partes son polémicas. Voy a intentar en
todo momento mantener una distancia lo mas imparcial posible sin entrar a
juzgar si determinadas acciones estaban o no justificadas. Japón ha tenido
criminales de guerra, ha cometido atrocidades en algunas ocasiones y también ha
pagado un alto precio por ello. No voy a justificar en ningún caso lo ocurrido,
pero si en alguna ocasión puedo indicar motivos subyacentes que puedan explicar
hasta cierto punto porque ocurrieron algunas cosas. Los pueblos no toman una
dirección u otra por caprichos, siempre hay motivos de fondo que a menudo se
pasan por alto. Es por ejemplo muy fácil culpar a los alemanes por haber votado
a Hitler, pero pocos recuerdan las condiciones impuestas tras la primera guerra
a Alemania, como algunos países insistieron en cobrar las indemnizaciones de
guerra incluso a costa de que los alemanes pasaran hambre y frio en invierno y
como eso pudo ayudar sin duda a demagogos populistas a hacerse con el poder. La
historia no ocurre por casualidad. Conocer las causas no disculpa los actos en
ningún caso, pero desconocerlas nos hace a menudo prejuzgar sin razones.
Finalmente comentaros que en la historia moderna,
aproximadamente a partir del siglo XIX se suele englobar los periodos dentro de
los reinados de diferentes emperadores. Por ejemplo ahora mismo están en Japón
en el “Periodo Heisei”, al menos hasta el 30 de Abril el 2019 cuando se supone
que abdicará el actual emperador. Intentaré en todo momento usar las fechas del
calendario Gregoriano para una mayor facilidad
Con esto termina esta primera entrada. La próxima
englobará varios periodos de la antigüedad que englobará seguramente desde el
mismo paleolítico hasta el siglo VII posiblemente. Los motivos mas obvios es
que son periodos en los que apenas hay registros y además son muy pocos los
restos que podemos ver de esa época. Obviamente a medida que nos vayamos
adentrando en tiempos mas actuales la cantidad de información y los restos de
esas épocas serán mucho mas abundantes.