Mencionado ya en la entrada sobre el periodo Heian, la
obra del Genji Monogatari (源氏物語) merece una entrada por si misma.
La importancia de esta obra es comparable, por establecer
un paralelismo al “Don Quijote” para la literatura en español. Lamentablemente
hasta hace no muchos años era prácticamente imposible obtener en el mercado de
habla hispana de una edición, y no digamos ya una de calidad de esta obra.
Afortunadamente esta situación se ha corregido y disponemos actualmente de
varias ediciones, incluyendo una que es una traducción directa del original.
Pero empecemos por la autora. Generalmente se considera
que esta obra fue escrita por Murasaki Shikibu (紫 式部 978 DC – 1014 DC). En nuestro idioma esto se
traduce como “Dama Murasaki”. Una mujer de la corte imperial del periodo Heian
emparentada con la familia Fujiwara que vivió casi toda su vida en la corte
imperial. Durante buena parte de su vida esa corte fue regida por el emperador Ichijō
Tennō, y durante su reinado se considera que el periodo Heian alcanzó su máximo
esplendor. No solo encontramos durante su reinado la obra de Murasaki, sino
también la de Sei Shōnagon (清少納言). Otra dama de compañía que
escribió otro clásico de la literatura japonesa conocido como “El libro de la
almohada”.
Murasaki nació en una familia de literatos. Hija de Fujiwara
no Tametoki y nieta del famoso poeta “waka” Fujiwara no Kanesuke que a día de
hoy cuenta con muchos lectores interesados en su poesía. Casada con un noble de su misma clase social
tuvo una hija con el nombre de Daini no Sanmi que también se labró una
reputación como poetisa. También escribió un diario que se considera igualmente
una obra clásica del periodo Heian
Pero fue la obra de Murasaki la que le ganó el favor de
la corte e hizo que se convirtiera en una dama de la corte de la emperatriz Fujiwara
no Shōshi. Murió en Kyoto en el 1014 y su tumba es a día de hoy un lugar muy
visitado
También hay algunas estatuas dedicadas a la memoria de
esta escritora, como la que se encuentra en el templo Ishiyama-dera de la
ciudad de Ōtsu, en la ciudad de Fukui, en Uji y la lista sigue
También hay algunas estatuas dedicadas a la memoria de
esta escritora, como la que se encuentra en el templo Ishiyama-dera de la
ciudad de Ōtsu, en la ciudad de Fukui, en Uji y la lista sigue
La obra en sí misma no tiene título, ni aparece en el
mismo el nombre de la autora. De hecho hay controversia acerca de si toda la
obra es suya o algunas partes fueron escritas por su hija. Con todo dejaremos
esas especulaciones para los expertos y nos centraremos en la obra.
El cuento de Genji es una obra extensa. Las ediciones en español
suelen exceder las 1300 páginas y suele aparecer en dos o mas tomos. El
original se escribió en japonés clásico usando el silabario hiragana conocido
en esa época como “onnade” y eso añade dos complicaciones mas a la traducción.
Una es el uso de caracteres ligeramente diferentes a los actuales, o algunos
que ya no se usan. El otro problema tiene mas que ver con el idioma japonés en
si mismo. La escritura japonesa usa kanas, que son caracteres que simbolizan
sonidos de silabas. El castellano usa letras de origen romano y griego, y cada
silaba se produce por una combinación de una o mas consonantes con una vocal (o
solo vocales). En el kana encontramos las mismas vocales que en el castellano,
pero únicamente una consonante suelta que es la “N”. El resto de los sonidos
silábicos se crean asignando un carácter a cada uno. Algunos son los mismos con
una pequeña marca para diferenciarlos, podéis consultar este enlace para
hacernos una idea mas clara:
El japonés escrito usa también ideogramas de origen chino
conocidos como kanji. Estos ideogramas tienen varias lecturas, pero además
acarrean un significado. Cuando una palabra puede hacer referencia a varias
cosas (como en castellano “Banco” que puede ser un asiento o una empresa
financiera) lo deducimos por el contexto, mientras que en japonés se distingue
por el kanji utilizado. Al estar escrita en kana aparecen a menudo confusiones
de este tipo que no siempre son fáciles de distinguir, mas cuando hablamos de
una obra ambientada en la corte imperial de hace mas de mil años.
Y es que la obra se escribió para las mujeres de la
corte. Un grupo social relativamente pequeño con unos usos y costumbres muy
particulares. Su lectura incluso en una traducción directa resulta en ocasiones
complicada por el respeto que se tiene al original, donde a menudo se omiten
nombres de personajes pasando a identificarlos de forma indirecta. La costumbre
de que la nobleza se expresara a menudo mediante citas a poemas famosos o proverbios tampoco ayuda.
Algunas ediciones que se han basado en traducciones al
inglés o Alemán omiten fragmentos de contenido homosexual o sexo bastante
explicito, la única versión que conozco que es directa y completa sería la de Hiroko Izumi Shimono e Iván Pinto Román del Fondo Editorial
de la Asociación Peruano Japonesa. Las otras dos adaptaciones, la de Ediciones
Atalanta y la de Destino se basan en versiones en otros idiomas y contienen
adaptaciones para facilitar su lectura y posiblemente censuras contenidas en
las versiones en las que se basan. Dejo a elección de cada uno el buscar una u
otra.
Pero pasemos a la obra. El cuento de Genji nos narra la
historia desde su nacimiento hasta su muerte (y mas allá) de un personaje ficticio
de esa corte llamado “Hikaru Genji” o “Genji el resplandeciente”. Un joven
noble de la corte y sus diferentes amores con varias mujeres a lo largo de los
años. En la novela es un hijo del emperador Kiritsubo con una dama de rango
inferior de la corte (la poligamia era común entre la nobleza, así como el
tener no solo esposas, sino también concubinas). El joven conocerá y mantendrá
relaciones con diferentes mujeres de diferente condición, hasta que
insatisfecho por no encontrar a la mujer perfecta adoptará a una niña llamada
Murasaki a la que criará para conseguir su ideal. Lamentablemente ella no podrá
darle hijos.
La historia pasará desde el Genji niño a adolescente, adulto
y pasará a narrarnos sus líos en la corte, su caída en desgracia y exilio y posterior
retorno. Una historia que abarca desde su vida hasta su muerte e incluso un
poco mas allá. Una obra que incluso con la dificultad ocasional de su lectura
por los motivos antes mencionados, y porque está ambientada en una cultura muy
diferente a la nuestra atrapa al lector por su fuerza e interés. Antes que
desgranar la historia, prefiero centrarme en otros aspectos y dejar a cada uno
el descubrir por si mismo esta joya de la literatura universal
Existe en la ciudad Uji al sur de Kyoto un museo dedicado
íntegramente a esta obra
Se puso en circulación en el año 2000 una edición de
billetes de 2000 yen que en su parte
trasera incluye una escena de esta obra con un retrato de la autora en la
esquina inferior derecha.
La historia de Genji se ha adaptado en multitud de
formatos. Una película de 1951 dirigida por Kôzaburô Yoshimura, otra con el
mismo nombre en 1966 dirigida por Kon Ichikawa, y otras mas hasta actualmente
en el 2011 con el nombre de Genji Monogatari: Sennen no Nazo. Seguro que me
dejo varias en el tintero. También se ha adaptado al manga y a otros formatos.
Muchas historias se inspiran directa o indirectamente en este libro.
La pregunta obvia sería ¿Pero me va a gustar el
libro?
Bueno, eso es un aspecto personal que me resulta
imposible averiguar. A mi me gustó mucho y lo encontré una lectura apasionante
no ya por conocer las costumbres y organización de la corte imperial Heian,
sino porque además la historia es buena. La trama es interesante y llena de
personajes. El príncipe Genji es un romántico a la búsqueda de un ideal y los
personajes de la obra son seres humanos que aman y odian. Al margen de su valor
como documento histórico lo cierto es que Murasaki se revela como una gran
escritora y mejor novelista. Lo importante a veces no es solo la historia que
se cuenta, sino el modo en el que se cuenta. Incluso teniendo en cuenta los casi
mil años de la historia, y que estamos leyendo una traducción y no el original
el libro engancha. Por otro lado no podemos obviar que el ambiente en el que se
narra el libro es muy diferente a cualquiera actual y que en ocasiones podemos
perdernos entre tanto personaje y mas cuando los nombres de los mismos varían
en ocasiones.
En cualquier caso personalmente encuentro el libro
apasionante, pero como en todo os recuerdo que esto no es mas que una opinión
personal